No es una pregunta hecha a ti o a mí, sino al tarot, pues que sean los arcanos los que contesten.
El Loco: Aquí está clarísimo, es El Loco invertido, acabarás loca.
El Mago: Aprende a jugar un poco mejor con tus sentimientos, sino estás en clara desventaja.
La Sacerdotisa: Mi mente es como un libro, me acuerdo “de todo”
La Emperatriz: Tienes que aprender de mi, a ser mas astuta, ya sabes, como los zorros.
El Emperador: En lo de la voluntad y la disciplina no te pareces mucho a mi, lo tengo mas fácil que tu, cuando algo no me interesa, lo desprecio y punto, soy superior a ello.
El Papa: Siempre hay un punto de bondad dentro de uno, aunque a veces no lo parezca, y siempre queda aprender la lección.
El Enamorado: No se a quien odiar mas, a la de la derecha, a la de la izquierda o a mi mismo.
El Carro: Al final te das cuenta, hay que subirse y tirar para adelante, cuanto mas tardes, mas costará, y ¡cuidado!, no sea que pierdas el último carro y después te arrepientas.
La Justicia: Te parece que me conoces, pero no, ¿no ves que estoy haciendo trampas delante de tus narices y no te das cuenta?.
El Ermitaño: ¡Bah!, con lo tranquilo que estaba, ahora va a venir a molestar otro que se ha quedado como yo, solo con su odio.
La Rueda: Todo son ciclos, como te estanques en uno estás jodida.
La Fuerza: tu tienes un par de ovarios para superar esto, ¿o no?
El Colgado: ¿amores?, ¿dependencias?, no se que decirte, así, colgado, no se está muy cómodo.
El Arcano sin nombre: ¿por donde hay que empezar a cortar?
Templanza: Si no me tienes en cuenta te precipitarás y te equivocarás, lo sabes
El Diablo: haces muy bien en odiar así, adelante, sigue, un poquito mas, y tendré a uno más encadenado, para burlarme de él para siempre.
La Torre: Cuando llegues a mi, si sigues así, algo se destruirá, es por ley natural, mejor que haya sido el odio, o será algún fusible de tu cabeza, ¿habrá recambio?.
La Estrella: En esta carta tienes dos opciones, o estás arriba brillando, con lo cual lo habrás superado, o estás como la mujer de abajo, así, bien a gusto, con tu odio, pero arrodillada.
La Luna: Bienvenida al mundo de la angustia y la ansiedad, ¡las noches son mías!
El Sol ¡cuidado! Puedes abrasarte, y recuerda, las heridas por quemaduras son largas de curar y muy dolorosas
El Juicio: Mira al ángel de la trompeta, ¿Qué hace? decir de una puta vez las cosas claras, ¡aunque arda Troya!.
El Mundo: Hay mucho mundo por delante para perdértelo por uno o dos personajes que solo merecen tu desprecio, no es lógico ni inteligente, y eso, lo sabes.
Ahora, elige tres cartas
Patricio